martes, 18 de noviembre de 2008

Fluir de la conciencia:¿amigo?

Cierto día, cierta persona me acompañó a cierto lugar, para ser más específico fue hace tiempo, era mi amigo Esteban Craft que me acompañaría a visitar a mi abuelita al hospital. Lo fui a buscar temprano pero ya lo notaba un poco extraño. Le pregunté que le pasaba, pero no me escuchó, sólo me ignoró, y me pregunté ¿Qué estará pensando?...
“Miro afuera no pasa el tiempo me aburro y escucho los chistes del lechero ojalá me devuelvan mi vestón sino no puedo entrar acaba de pasar un pájaro porque será rápido el tiempo un día estamos entando y a siguiente ya es navidad por el frío que siento presiento que el chocolate caliente subió de precio por el dólar Roma al revés es amor por eso mejor duermo…”
Al final visitamos a mi abuela, aunque no me respondió a nada de lo que le pregunté, nada más que ¡sí por favor! Y ¡un poco más!
Estaba tan distraído que ni presto atención cuando le conté a mi abuela su vida, verán Esteban es un psicólogo respetado en Puerto Montt, durante varios años trabajó sin vacaciones hasta que cumplió los treinta y nueve, pero para ese entonces entró en una especie de “transe realidad-sueño” como lo definió él, significa que cuando está despierto se salta la realidad y vive en sus pensamientos.
Esteban tenía esposa y tres maravillosos hijos, los que lamentablemente dejó de preocuparse por su nueva forma de “vida”.
Ya van tres años desde que comenzó su enfermedad y la visita a mi abuelita, han sucedido varios cambios en su vida, por falta de atención su esposa y sus tres hijos decidieron finalmente abandonarlo dejándolo en un departamento donde pasa sus días pensando y pensando, dejó su trabajo y su propia vida, ahora sólo vive de pensamientos y se alimenta de los almuerzos que le pasó a dejar todos los días, ya es hora de irme, es la hora el almuerzo…